Mientras esta semana algunos conservacionistas lamentaban la muerte de un oso de anteojos (Tremarctos ornatus) en Arauca, la Corporación Autónoma Regional del alto Magdalena (CAM) anunció una buena noticia: en San Agustín, al sur del del Huila, las cámaras trampa que suelen usar los biólogos para detallar la biodiversidad, capturaron una valiosa imagen: una madre con sus dos oseznos intentando trepar a un árbol. Se trata de una fotografía que representa un gran avance en el estado de conservación de esta amenazada especie.