Durante una reunión en Bogotá, los mandatarios de ciudades capitales expresaron su preocupación por el deterioro de la seguridad en Colombia.

Denunciaron que el Gobierno Nacional redujo en más de 1.5 billones de pesos el presupuesto para seguridad, lo que compromete la capacidad operativa de las instituciones encargadas del orden público.

El alcalde de Cali, Alejandro Eder, explicó que esta disminución afecta funciones clave como la inteligencia, la policía judicial y la capacidad de acción del Ejército y la Fuerza Aérea.