La final de la Copa Colombia, entre América de Cali y Atlético Nacional, en el estadio Pascual Guerrero, terminó en una batalla campal que, según la Policía Metropolitana de Cali, dejó más de 30 personas heridas, entre los que se encuentran ocho policías; así como se registró el robo del arma de un uniformado, por lo que se abrió una noticia criminal contra los barristas del equipo local. Sumado a esto, la alcaldía pidió acciones a la Comisión del Fútbol, así como indicó que entregará una recompensa por información de quienes estuvieron detrás de los desmanes.