El reclutamiento, uso, utilización y violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes por grupos armados ilegales no pararon con el acuerdo de La Habana. Grupos armados, como residuales de Farc, Eln y otros, dedicados principalmente a las actividades criminales de narcotráfico y microtráfico, siguen aumentando sus organizaciones criminales con niños, niñas y adolescentes.

Esta práctica, que fue generalizada por las Farc y las Auc, dañó para siempre la vida de miles de menores de edad que fueron arrastrados a la ilegalidad. Además de víctimas, a la fuerza también se convirtieron en victimarios. Ejemplo de ello es alias la Mona, mujer de 22 años, capturada hace una semana, segunda cabecilla de finanzas del grupo residual Dagoberto Ramos, que opera en el Cauca. Ella, víctima de reclutamiento en su adolescencia, es acusada de varios delitos, incluido el de reclutamiento de menores de edad.